dijous, 3 de setembre del 2015

HOJA PARROQUIAL Nº4: LA DECEPCIÓN: ‘PENSABA QUE SERÍA MÁS GRANDE’

Así daba rienda suelta a su decepción Fray Ángel ‘the Hacker’ al visitar por primera vez en su corta existencia el castillo de Burriac, meta de nuestra peregrinación de hoy. Pero no adelantemos acontecimientos.

En esta convocatoria del que sería el último domingo de rigurosos calores y bochorno a tenor de lo que dicen los metereólogos de los medios, puntuales en el lugar de encuentro Fray Manel ‘Gutenberg’, Fray Pere de Arenales del Mar, Fray Ángel ‘the Hacker’ y el que suscribe, Fray Borja del Buen Torrente. Durante la semana habíamos tratado la posibilidad de visitar el Castillo de San Vicente de Burriac, situado entre los municipios de Cabrera de Mar, Mataró (capital del Maresme) y Argentona (capital, Buenos Aires, ¿no?). Como está lejos, y la congregación ha consagrado la puntualidad en la hora de regreso como uno de los pilares de su fe, decidimos ir allí por la vía directa, Cruz de Rubí(t), Pozo del Hielo y Cañamares. Dese allí toma las riendas Fray Pere de Arenales del Mar, quien nos enseña un divertido senderillo que parcialmente coincide con la riera, y siguiendo el cual llegamos a Dosríos por la parte del lavadero público. Seguimos por la riera de este municipio hacia el ‘políngano’ de la Carrera Pedestre Campo a Través (el Cros) y enlazamos, por asfalto, con el ´políngano’ de Cabrera de Mar, donde comienza la dura subida por pista hasta nuestro objetivo del día. Hayque decir aquí que aunque comenzamos la peregrinación de hoy con una agradable temperatura de 19-20°, ahora mismo estamos ya a 28° lo cual provoca una sudada general, aunque todos llevemos las ligeras y frescas sotanas de lino que La Orden nos permite utilizar para combatir los rigores del verano.

Breve parada en el collado donde está el Monolito conmemorativo de los 5 siglos de existencia de las municipalidades del Maresme. Honramos tan insigne estela ‘marcando territorio’ en la zona boscosa cercana y encaramos las últimas rampas (pendientes máximas del 24 y 30% según mi ciclocomputador), parte de ellas, obviamente, a pie.

Fray Borja, que ha visitado este sitio en varias ocasiones, 2 de ellas este mismo año, monta guardia para evitar el robo de nuestras monturas mientras el resto de la congregación realizan un breve tour turístico por las ruinas del castillo, siendo este momento el del comentario decepcionado de quien nunca antes había visitado este lugar: Fray Ángel esperaba encontrarse con algo parecico a las murallas de Ávila y por tanto sentenció ‘Pues yo pensaba que sería más grande’.


Son las 10.30 h cuando, tras un breve pica-pica descendemos directamente a Argentona (capital, Buenos Aires), recargamos agua en la Fuente Picante (que por cierto, no pica), atravesamos nuevamente, ahora por caminos de tierra, el ‘políngano’ de la Carrera Pedestre Campo a Través (El Cros), y luego alternamos tramos de paseos marítimos y puertos deportivos con otros de la Nacional II hasta llegar a Arenys de Mar, donde Fray Pere nos obsequia con una variante desconocida para el resto de la congregación, y que sube hasta el pabellón polideportivo de Arenales del Mar para volver a su riera: ligera subida, pero nuestras piernas están ya suficientemente cargadas, llevamos ya más de 54 km, aunque eso sí, nos evitamos los eternos para-arranca que habría conllevado ascender por la riera de Arenales del Mar.


Nos despedimos de Fray Pere, quien parte mañana y para 2 semanas a evangelizar a los infieles de Bangla Desh (¡buen viaje tengas, hermano!), y Fray Ángel, Fray Manel y un servidor subimos por la Riera, donde saludamos a Fray David ‘Natxo Vidal’ que  estaba comprando el pan (en estas épocas de rigurosos calores estivales, el opta por realizar sus ejercicios espirituales por las tardes). Seguimos por el ya tradicional pipi-can y caca-can (el tramo superior de la riera) hacia el Parque del Caserío de Jalpín y Arenales de Arriba, donde nos despedimos hasta la próxima semana. La sudada ha sido de órdago, acabamos con 58 km y 875 metros de desnivel positivo. Aunque la ruta ha sido eminentemente rodadora (de ahí nuestra media de hoy, que roza los 15 km/h), la pendiente media es del 6%, más propia de rutas clásicas más técnicas, y lo que da una cabal idea de las pendientes acumuladas para ascender al Monolito y al Castillo.


Podéis ir en Paz, alabado sea el Señor. 

Sortida del 30 d' agost del 2015
Fray Borja del Buen Torrente

2 comentaris:

  1. Hermanos beteteros...
    Despues de la loable gesta de "atacar" el Burriach por su flanco este-sudeste-nornoroeste solo os quedaba hacer como nosotros los BARRIGAS TEAM , asaltar el castillo bicicleta en ristre para , si fuera menester, utilizar los susodichos artefactos como escudos de defensa o arma arrojadiza ante los posible defensores de la fortaleza.
    En cualquier caso creo que habeis "disfrutado" tanto como nosotros de las virtudes fisicomentales de tan preciada conquista.
    Demos gracias a Dios.

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  2. Fray Borja del Buen Torrente3 de setembre del 2015, a les 14:41

    Aleluya, loado sea el Señor: Karl Marx sigue leyendo la Hoja Parroquial. aunque este domingo nos hayamos excedido en la velocidad, nuestra maxima sigue siendo el perfeccionamiento en el camino de la fe BTTera por la vía de la contemplación. La congregación os acogerá con los brazos abiertos si profesáis los mismos principios. Podéis ir en paz, y no os apartéis del buen y verdadero camino.

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